
El precio de la delgadez
Algunas mujeres han experimentado efectos secundarios graves en su salud mental tras usar Mounjaro, una popular inyección para la pérdida de peso. Han descrito ataques de pánico, ansiedad extrema y una sensación de «tirón en el cerebro» poco después de iniciar el tratamiento.
Inyecciones para adelgazar
Mounjaro, junto con Ozempic y Wegovy, puede ayudar a perder hasta un 15 % del peso corporal en un año. En marzo de 2025, 1.5 millones de británicos usaron estas inyecciones, consideradas un avance en la lucha contra la obesidad.
Sin embargo, un número creciente de pacientes ha informado síntomas inesperados como insomnio, temblores, dificultad para respirar y tinnitus, aunque estos efectos no están oficialmente reconocidos.

Efectos secundarios graves
Charlotte Lloyd, de 37 años, comenzó a utilizar las inyecciones de Mounjaro tras aumentar de peso por un tratamiento de fertilidad. Poco después de su primera dosis de 2.5 mg, perdió el apetito y tuvo problemas para dormir.
Tras la segunda dosis, dejó de dormir por completo y sufrió ataques de pánico y temblores durante cinco semanas. «Era como un mal viaje de drogas que no terminaba. No podía ver cómo iba a sobrevivir a esto”, detalló Lloyd sobre la terrible experiencia.
Molestias que derivan en urgencias
Su ansiedad extrema la llevó a urgencias, donde su frecuencia cardíaca estaba elevada pero no irregular. Sin soluciones médicas, renunció a su trabajo y terminó su relación.
Otros casos similares incluyen a Maria Edwards, quien fue hospitalizada 48 horas después de su primera dosis, y a Julie Peters, quien sufrió un ataque de pánico de dos horas tras dos meses de tratamiento. Ambas reportaron síntomas como dificultad para respirar, temblores y tinnitus.
Investigaciones de las farmacéuticas
Un estudio publicado en 2024 en el International Journal of Clinical Pharmacy vinculó 481 eventos psiquiátricos con inyecciones para bajar de peso. Aunque estos efectos solo representaron 1.2 % de los reportes, los investigadores pidieron más estudios sobre su impacto en la salud mental.
Las farmacéuticas Eli Lilly y Novo Nordisk afirman que la seguridad del paciente es su prioridad y que los organismos reguladores han evaluado los riesgos y beneficios de sus medicamentos. Sin embargo, algunos estudios recientes sugieren que Ozempic y Mounjaro podrían aumentar el riesgo de depresión y pensamientos suicidas.
Lloyd advierte: «Si la gente supiera que estos medicamentos pueden causar efectos secundarios catastróficos, tomarían decisiones más informadas.»